El 7 de diciembre se acostumbra en mi país, Colombia, prender velitas y faroles afuera de las casa, en los balcones o ventanas, en las aceras y jardines. El día de las velitas es una fiesta, las familias se reúnen y los niños son los que más se gozan el encender cada vela.
Ayer no pude prender las velitas porque no paró de llover. Pero hoy me desquité. Así que organicé unas bolsitas con papel reciclado, un poco de tierra y la velita.
Prendí las velitas conmigo misma, y fueron todo un éxito. El detalle del desprendido de las hojas les dio un toque original a mis improvisados faroles. Fue hermoso contemplar mi balcón brindando su luz a la cuidad.
Que esta sea la luz de la felicidad!
3 comentarios:
Muy bonito.
¿Día de las velitas? No tenía idea de que eso existiera. Te quedaron súper bonitos los faroles de papel y tierra =) Tal vez te robe la idea el próximo año en dia de muertos, porque aquí no hay de velitas.
Gracias!
Sufit, lo mejor es que mientras las prendes puedes tener en mente buenos deseos!
Saludos.
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